martes, julio 25, 2006

Los clones están de mas, llamen al basurero municipal.


¿Cuál es el punto de pasar leyes contra la clonación? ¿Para qué molestarse? La verdad es que tenemos clones hace mucho, mucho tiempo. Casi todo el mundo quiere y llega a ser el clon de alguien. Un clon algo más gordo, feo y estúpido; pero un clon al final. El mundo de hoy, de alguna manera u otra, busca la forma de gritarte al oído que no eres lo suficientemente bueno para ser tú mismo. Quizá eres 'único' o 'especial', pero eso no interesa. A menos que seas esa persona 'única' o 'especial' que todos los demas quieren ser. Resulta irónico que exista esta onda de aprecio a la diversidad y a las diferencias entre las personas cuando a través de todo medio posible se te trata de decir cómo ser. La sociedad busca llevarse tu identidad y destrozarla en medio de comerciales sobre abdominales de acero y series acerca de 'típicos' adolescentes con 'problemas reales'. Esto es lo que sucede y viene sucediendo desde hace bastante; hay un número variado de factores que en conjunto llamamos 'sociedad' y se encarga de succionar tu personalidad. Luego, hay una naturaleza sumisa en la mayoría de las personas que hace que en vez de decir: 'Alto. Esto está mal', muchos se queden callados y busquen adaptarse a su nueva situación. Todos buscamos un esterotipo a seguir (o una mezcla de varios) y nos decimos que en verdad somos así, y que ser así está bien. No. No está bien. Ser la copia de una idea preconfigurada de 'persona' está mal. Ser el clon defectuoso de algún ídolo de la televisión, de la moda, de la música o de lo que chucha sea está mal. Quizá no te diste cuenta, pero ya la cagaste. Qué pena, no hay regreso. La verdad es que probablemente sí hay regreso, pero seamos dramáticos. Tu alma esta encadenada al basurero andante del mundo y ahí se queda. ¿La sociedad es mala? ¿La vida es injusta? ¿No te dieron permiso para ir al concierto de Hoja de Parra? ¿Britney no va a venir al Perú? No me importa. No me afecta. Soy un pirata. Arrg.
Editado en enero de 2009.

lunes, julio 17, 2006

Guía para descartar gente con solo ver su nick de Messenger


Por supuesto que yo no estoy sujeto a estas reglas, si tienes la suerte de tenerme en Messenger, deberías tener un altar en tu cuarto con mis fotos al que rindas culto.

Sin mas que añadir, que comience la masacre: Todas las personas que tengan al menos una característica señalada acá deberían ser mutilados y crucificados de cabeza, claro que con todo un equipo de doctores que asegure que viva y sufra al máximo.

Ø EsTo EsTa DeScArTaDo Ok? No más comentarios al respecto.
Ø Cualquier tipo de letra rara o hecha con algún programa para niños idiotas que no quieren hacer tareas o escuchen Blink 182 / Good Charlotte / Simple Plan.
Ø Cualquiera que tenga activado “Lo que estoy escuchando” y aparezca una canción de los grupos mencionados antes.
Ø ESTO TAMBIEN ESTA MAL. Esta bien que quieras llamar la atención pero escribir así es GROTESCO.
Ø Cualquier comentario en ingles. Peor si es la letra de alguna canción de algún grupo comercial.
Ø Letras de color en general. Estoy seguro que la personalidad rosada que tienes se te sale por los ojos, no hay necesidad de aclararlo con unas letras chillonas y horribles que maltratan mis ojos. Esta característica puede ser dejada de lado dependiendo de que tan buena este la chica en cuestión. O si la tengo en Messenger (oops...).
Ø Las letritas de “Trade Mark” TM.
Ø Cualquier detalle estúpido que creas que hace tu nick “diferente” o “especial”, en realidad lo hace… estúpido. No hay otra palabra.
Ø Cualquier nick que tenga un mensaje secreto tan secreto y genial como este: NMI. No me importa. Además, ¿Para qué hacer eso si nadie sabe que significa?¿Te divierte ser tan misterios@?. Muérete.
Ø Faltas de ortografía. Simplemente se ve mal. Esta mal.
Ø Cualquier indicio de felicidad o satisfacción en general.

Y eso es todo por hoy, damas y caballeros. AdIoS.

sábado, julio 08, 2006

Violencia y Poder, apreciación pesimista… o realista.

El texto de Arendt plantea la relación violencia – poder, según mi punto de vista, de una manera muy fuera de la realidad. Ni siquiera da una definición clara de lo que vendría a ser el “poder” verdadero, y repite cosas que ya desarrollo en párrafos anteriores, para… ¿llenar espacios? Probablemente lo que yo haré para llenar las quinientas palabras que tengo que escribir, todavía a mano, no seas malo… bueno que importa.

El poder utópico del que habla Arendt, ese poder tan puro y tan basado en valores, a causa de la organización, es un poder que reside y generalmente se queda en la conciencia de cada uno. Un poder que uno sabe que tiene pero no le sirve para pagar las cuentas, ni para comer. Ni siquiera te ayuda a dormir tranquilo, porque sabes que aun cuando tienes la conciencia limpia siempre va a haber una mano que te puede destruir en cualquier momento. Algo más grande que te deja en sombras, que eclipsa hasta a Dios mismo, te quita todo, tu trabajo, tu dinero, tu familia, tu honor, tu identidad, tu libertad, tu fe. Todo. El poder que tenías se esfuma y queda en tinieblas. ¿Podrá resurgir? Claro que si, nada es imposible. Pero es improbable. Lo vemos a diario, mentes creativas, criollas, tan peruanas, tratando de salir adelante son aplastadas sin asco por “la mano”. Empresarios, el jefe, el presidente, los militares, etc., y nadie hace nada. Supongo que hay gente destinada a ganar y otros a perder. Y los que ganan se aseguran que los que le siguen vayan a ganar otra vez, y así sigue el ciclo. Naces pobre, mueres pobre. Naces rico, mueres rico, o mueres pobre pero otro rico lo cubre.
¿De que estaba hablando al comenzar? Ah, claro, el poder que ‘puede’ resurgir. Bueno, siempre hay leyendas y gente extraordinaria, pero para los mortales comunes y silvestres, la mano simplemente te aplasta y te mata. Y el poder se muere contigo. El ‘falso poder’ del que habla Arendt, si lo vemos en la realidad parece tan consistente que se vuelve verdadero. Y el poder del pueblo que esta tan lejos, tan distante, queda como ilusión. Entonces, me pregunto si el poder de mandar, el poder del cañón, es en verdad tan malo como lo pinta Arendt. Todo esto viene desde la mente de un pobre humano de mente fragil y comun, no yo. Yo soy genial, y tengo el verdadero poder.

Conclusión: Dos combos McViolencia agrandados, por favor.

Malditos locutores, no toquen a los niños.

Cual es el problema con los locutores de radio, no los entiendo, en especial a los idiotas que hacen los programas de la mañana. Es raro porque yo también pensé, en mi época, que eran de puta madre y chéveres y rebeldes, y desde hace un tiempo quería escribir algo sobre ellos. Sinceramente, no se que tienen en la cabeza. Dejando de lado que tienen como treinta años y no hay razón para que se comporten como adolescentes… (De los que no quieren hacer sus tareas y tienen una extraña necesidad de llamar la atención a toda costa, generalmente quedando como idiotas o adoptando algún estereotipo popular de la época) también hablan como si en verdad supieran como piensan los chicos y chicas y fueran una especie de ejemplo a seguir. No, no eres bacán, tienes treinta años y vives con tus papas, nunca acabaste la universidad o te metiste a algún instituto mediocre, tu único logro en la vida es tu patético programa matutino hecho para estúpidos escolares sin personalidad que viajan felices escuchando tus tonterías en su movilidad. Tu público esta conformado por niños idiotas, gran logro, gran llegada, gran cambio en la sociedad. Pero, ¡Oh pamplinas! Sigues siendo un parasito en el mundo.

Estoy seguro que hay gente que los defenderá eternamente diciendo que en verdad si saben como son los adolescentes y por eso se conectan con el publico y dan su mensajito y que en verdad, que no sea malo, que si son graciosos, etc. No me importa. Cualquiera que diga eso solo me demuestra que tiene menos cerebro que los idiotas a los que defiende. Si, a ti que te gusta mañana maldita, si tienes mas de doce años, NO VALES LA PENA. Ahórrales billete a tus viejos y métete un tiro. Sin huevadas.

No se, me dan pena, porque seguro habrán tenido algún trauma de infancia, estos locutores del demonio. No es mi culpa que te hallan abusado de niño, que te golpearan brutalmente todos los días, que un niño gordo y afeminado te acosara, que nunca conseguiste una enamorada que no tenga bigote o pueda ser comparada con una ballena, que sabré yo. No fuiste feliz en tu adolescencia, o te gustó demasiado: Lo siento, no hay viaje de regreso. Ojalá te atropelle una manada de simios.